Esta semana nos vamos de viaje a Islandia. La idea es que conozcáis aquellas cataratas, cañones y paisajes más representativos del sur del país y proponer un posible destino para este verano a aquellos que ya estéis planeando donde pasar vuestras merecidas vacaciones de julio o agosto.
Comenzamos pues una aventura que nos llevará por la siguiente ruta, visitando los puntos señalados con una cruz en el mapa:
Circulando tranquilamente por el sur del país desde la capital Reykjavik, nos cruzamos de vez en cuando con algún que otro vehículo en un país de algo más de 300.000 habitantes, de los cuales más de la mitad se concentran en la capital y que cuenta todavía con un turismo limitado.
Y así, vamos encontrando poco a poco distintas pinceladas características del paisaje islandés.
Primero, los secaderos de bacalao que proporcionan a los habitantes del país uno de sus más típicos aperitivos: el bacalao seco sin más o untado con mantequilla.
También, las balas de heno desperdigadas en interminables extensiones verdes.
Hay ovejas agrupadas de tres en tres en los rincones más recónditos y escarpados.
Además, el musgo espeso que cubre la mayor parte de la isla resulta muy divertido de pisar.
Finalmente, las bayas de arándanos son un complemento perfecto para el skyr, el típico yogur islandés con una textura más parecida a la de la crema de queso que a la del yogur. El de sabor natural está buenísimo con estos frutos.
A lo largo de la ruta, una vez pasado Selfoss y antes de llegar a Hella no podemos perdernos la cascada Urridafoss.
Después, puede ser un buen momento para adentrarse en el Parque Nacional de Thórsmörk. Este lugar presenta múltiples atractivos que iremos viendo en distintos posts. Hoy, que hablamos de cataratas y cañones, no hay que dejar de visitar el cañón Stakkhólsgjá que se encuentra en su interior.
A continuación y todavía dentro del parque, habrá que detenerse en Seljalandsfoss, que además de ser una cascada impresionante, estrecha y con una elevada caída, tiene la particularidad de esconder un camino detrás de su cortina de agua, que permite ver la catarata desde el otro lado.
A mí, esa sensación de encontrarme en una especie de cueva tras la cascada me recordó a los mejores momentos de la expedición que emprenden el profesor Otto Lidenbrock y su sobrino en Viaje al centro de la tierra de Julio Verne.
Skógafoss es la siguiente cascada en nuestro camino, también en Thórsmörk. En esta ocasión su caudal es más ancho y su caída más fuerte.
Antes de ir en busca de nuestro último cañón y nuestra última cascada de hoy, bordeando la costa llegamos a la playa de Vik. Un paisaje casi lunar, en blanco y negro con robustas formaciones rocosas tanto en el mar como en la costa. En estas últimas, sobre escarpados acantilados podréis avistar frailecillos si es la época idónea.
A lo lejos, se divisa la iglesia de Vik que en el punto más elevado de la población, bien merece ser inmortalizada por nuestra cámara.
Hacia el oeste desde Kirkjubaejarklaustur nos desviamos para hacer una pequeña ruta de senderismo en el cañón Fjadrárgljúfur. Las vistas del mismo desde lo alto impresionan. ¡Qué pequeños somos ante las caprichosas formaciones de la naturaleza!
Finalmente, dentro del Parque Nacional Landmannalaugar, hoy queremos destacar esta preciosa cascada en el primer nivel del parque.
Os invito a agrandar estas últimas fotos para que podáis apreciar qué pequeñitos son los grupos de excursionistas comparados con el tamaño tanto del cañón como de la catarata.
Consejos Prácticos:
-Islandia está surcada por una única carretera principal, la Ring Road o Carretera Circular(CN1). Está en buenas condiciones y por ella puede circularse en cualquier coche de alquiler, ya sea todo-terreno o no. Sin embargo, tenéis que tener en cuenta que para llegar a algunos de los puntos de interés de nuestro viaje hay que salirse de la carretera mencionada y atravesar caminos sin asfaltar donde un turismo ordinario no será suficiente. Por otro lado, incluso con un todo-terreno podemos encontrarnos con algunas dificultades en determinadas etapas. Es el caso del Parque Nacional de Thórsmörk, al que hemos hecho alusión y donde los diversos ríos existentes en caso de lluvias abundantes pueden ser difíciles de cruzar, siendo necesario utilizar vehículos con ruedas especiales, más altas de lo normal.
Todo esto no debe ser un impedimento para visitar estos lugares de increíble belleza, aunque sí es imprescindible informarse una vez en destino respecto al estado de los ríos, equiparse con un vehículo adecuado o, en caso de que lo consideremos oportuno, ir acompañados por guías locales en lugar de por nuestra cuenta.
Nosotros fuimos a Islandia con Island Tours, agencia especializada en Islandia con oficinas en Madrid y Barcelona que ofrece distintos tipos de viajes tanto en grupo como a tu aire, así como de turismo activo o más tradicionales. La experiencia fue muy buena por lo que os dejo el link a su página web aquí y os animo a visitarla.
-Además, tenéis que saber que en Islandia hace frío (la temperatura media es de 14 grados en julio y agosto) y llueve a ratos, en ocasiones con fuerza. De verdad, aunque estemos en julio o agosto hace frío, sopla el viento y llueve.
Sí, sí, no os riáis que esto es muy importante, porque implica que tenéis que llevar ropa para el frío y que en caso de mojarse se seque rápido. Definitivamente no os recomiendo los vaqueros que yo me llevé para recorrer el paisaje islandés. Además, es conveniente llevar calzado de montaña, porque en el país hay estupendas rutas de senderismo. Una de ellas se encuentra en una visita que hemos hecho hoy: el cañón Fjadrárgljúfur. Por último, se me ocurre que os puede resultar útil algún tipo de calzado impermeable, por si tenéis que cruzar algún río a pie.
¡Que tengáis buen viaje!
Begoña dijo,
marzo 14, 2010 @ 6:36 pm
Me ha encantado el recorrido, tanto las cascadas como los cañones, son impresionantes, el musgo que dá la impresión de ser mullido aunque húmedo, la foto de la playa con las rocas como un paisaje misterioso y la verdad que si me dá sensación de frío,está claro que para que encontrarnos estos paisajes tiene que llover y hacer frío.
Chus dijo,
marzo 14, 2010 @ 7:33 pm
Muy bonitas fotos.
Impresionantes cuando se amplian.
Que voy a decir yo de Islandia, ya sabes que me encantó, me sumo a tu recomendación de hacerse un viajecito por allí, es especial.
moonriver dijo,
marzo 15, 2010 @ 6:42 am
¡Yo quiero ir!
PS: ¿Aún te queda pescado seco? 😉
Hele dijo,
marzo 16, 2010 @ 10:00 am
qué chulo…tengo una amiga que va este verano, ya le he pasado el link.
A ver si tengo un rato y cuento mi excursion al Salto Angel en tu facebook
Susana dijo,
marzo 16, 2010 @ 3:31 pm
¡Hola a todas!
Me alegro de que os haya gustado el post de esta semana :). Ya sabéis que si queréis más Islandia hay otro post anterior con un recorrido distinto. El pescado seco creo que ahora lo tiene Chus, jaja. Y Hele, esperamos impacientes tus experiencias en el Salto Ángel (¡sí chicas, Hele ha estado allí!).
¡Un beso y una vez más gracias por los comentarios!